Algunas de las creaciones que se pueden hacer con cuero son extremadamente sencillas, pero lucen mucho, especialmente si se les da color. Hay muchas técnicas para trabajar el cuero, pero quizás la más fácil y con un resultado más agradecido es el teñido de la piel.
Para realizarlo se pueden usar varios productos, desde tintas chinas, hasta anilinas al alcohol, pasando por el sulfato de hierro. Después, una vez teñida la pieza, es recomendable darle una mano de cera. Una vez seca, frotamos con un trapo -que no deje pelos- para sacarle brillo site internet.
Hay que tener en cuenta que no siempre se obtiene el color esperado, pues éste dependerá del tipo de piel, del curtido de la misma y de otros factores, como los ambientales. Pero es seguro que teñir a tu gusto es el primer paso en la personalización de una pieza.
¡Anímate y dale color a tus creaciones!
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